Los obispos de la Jurisdicción Occidental (Oeste) de la Iglesia Metodista Unida han declarado a sus iglesias un "puerto seguro" para el clero LGBTQ+, informó Religion News Service. La 'Declaración de Puerto Seguro' se anunció el miércoles 06/11 cuando el Consejo de Obispos de los Metodistas Unidos concluyó su reunión de otoño (Hemisferio Norte) junto…
Los obispos de la Jurisdicción Occidental (Oeste) de la Iglesia Metodista Unida han declarado a sus iglesias un “puerto seguro” para el clero LGBTQ+, informó Religion News Service.
La ‘Declaración de Puerto Seguro‘ se anunció el miércoles 06/11 cuando el Consejo de Obispos de los Metodistas Unidos concluyó su reunión de otoño (Hemisferio Norte) junto al lago Junaluska, Carolina del Norte.
Esto sucede antes del 01/01/2020, cuando comenzarán a regir nuevas restricciones que fortalecerán la prohibición de la ordenación pastoral y el matrimonio de los miembros LGBTQ+.
La Jurisdicción Occidental de la Iglesia Metodista Unida está representada por los obispos Robert T. Hoshibata, del área episcopal de Phoenix; Minerva G. Carcaño, del área episcopal de San Francisco; Grant Hagiya, del área episcopal de Los Ángeles; Elaine JW Stanovsky, del Gran Área Episcopal del Noroeste; y Karen P. Oliveto, del Área Episcopal Mountain Sky.
En 2016, Oliveto fue consagrada la primer obispo abiertamente LGBTQ+ de la Iglesia Metodista Unida.
“Para los jóvenes que se preguntaron si todavía hay un hogar para ellos en la iglesia, espero que vean que en el Oeste decimos, sí, hay un lugar para ustedes. Hay un hogar para ti. Eres una parte vital del cuerpo de Cristo”, dijo ella.
“Estamos obsesionados por las acciones de la Conferencia General Especial de 2019, que imponen nuevas y dañinas definiciones y restricciones a la plena participación de las personas LGBTQ+ en la Iglesia y abandonan el compromiso robusto de las Escrituras para reducir el literalismo bíblico“, afirmó la declaración pública.
“No creemos que la Iglesia Metodista Unida tenga la autoridad o el poder de imponer límites al movimiento del Espíritu Santo de Dios en la vida de los amados niños LGBTQ+ de Dios”, se agregó.
“Sabemos que estamos tomando algunos riesgos al adoptar esta postura… Podemos ser desafiados, y, si lo son, el Consejo Judicial puede tener que decidir si lo que estamos haciendo es razonable o no“, dijo Stanovsky.
“Lo que estamos tratando de asegurar es que estamos cumpliendo nuestras responsabilidades con integridad y estándares. (No) no es que solo estemos arrojando por la ventana todas las expectativas del clero”.
Contra el Plan Tradicional
La Jurisdicción Occidental o del Oeste tiene antecedentes de liderar las tendencias entre los metodistas. En el pasado fue la que eligió
- al primer obispo asiáticoestadounidense de la denominación,
- la primera mujer obispo afroestadounidense, y
- la primera mujer obispo hispanoamericana.
En febrero, la Iglesia Metodista Unida aprobó, en una sesión especial de la Conferencia General, el organismo global de toma de decisiones de la denominación, el llamado “Plan Tradicional”, que prohíbe a los obispos consagrar, ordenar o comisionar a “homosexuales practicantes autoproclamados”.
La restricción estará vigente incluso si han sido elegidos o aprobados por el cuerpo eclesiástico apropiado. También prohíbe a los organismos eclesiásticos aprobarlos o recomendarlos como candidatos.
El plan también facilitará la presentación de quejas contra los Metodistas Unidos LGBTQ+ que buscan ingresar al ministerio y contra el clero que preside las bodas entre personas del mismo sexo, según los obispos de la Jurisdicción Occidental.
Pero ahora, la Jurisdicción Occidental informa que no retendrá ni cuestionará la ordenación basada únicamente en la identidad de género u orientación sexual de una persona.
Tampoco castigará al clero que oficia el matrimonio de “dos adultos de cualquier género u orientación sexual”, dijo.
“Al mismo tiempo, reconocemos y mantendremos el requisito de que el clero LGBTQ+, con todo el clero, mantenga los más altos estándares de vida santa en sus relaciones personales y profesionales“, dijeron los obispos en la declaración.
Esto obviamente provoca una fractura entre los Metodistas Unidos, diferencias ya informadas parcialmente por TercerAngel semanas atrás.
“Los obispos de la Jurisdicción Occidental no tienen la intención de actuar solos. Hacemos un llamado a toda la Iglesia para que ofrezca un puerto seguro para el clero LGBTQ+ y los laicos para que participen plenamente en la vida de la Iglesia Metodista Unida”, invitó la declaración.
Un caso interesante
Es notable, sin embargo, la popularidad que tiene la causa LGBTQ+ entre las nuevas generaciones.
Un caso interesante: el gobierno estudiantil de la Universidad de Duke, ha negado a la organización cristiana Young Life el estatus oficial de grupo estudiantil en el campus, a causa de su política sobre sexualidad.
La Universidad Duke (Duke University) es una de las universidades privadas más reconocidas de USA y del mundo.
En su edición de 2019, el ‘Times Higher Education’ ubicó a Duke en el puesto N°7 entre las mejores universidades estadounidenses.
Fundada en 1838, en la ciudad de Trinity, por metodistas y cuáqueros, su nombre rinde homenaje a Washington Duke, padre de uno de sus primeros benefactores, James Buchanan Duke, luego fue trasladada a la localidad de Durham, Carolina del Norte.
La decisión ocurrió en septiembre, en medio de enfrentamientos en todo el país entre grupos de estudiantes religiosos y colegios y universidades que han agregado políticas más sólidas de no discriminación de los LGBTQ+.
Jim Rayburn, de Gainesville, Texas, fue el fundador de Young Life en 1941, cuando recibió el encargo de alcanzar estudiantes de secundaria no interesados en ninguna iglesia. Para conectarse con ellos, Rayburn se propuso desarrollar relaciones con ellos en clubes semanales con diversas actividades artísticas.
Young Life, tal como muchos grupos evangélicos, considera que las relaciones entre personas del mismo sexo no pueden ni deben ocurrir. Su política prohíbe que sus integrantes y voluntarios alcancen puestos en la organización si se declaran LGBTQ+.
El periódico estudiantil Duke Chronicle informó que el gobierno estudiantil rechazó por unanimidad el reconocimiento oficial para el capítulo local de Young Life, porque hay una directiva de que cada grupo estudiantil de Duke respetará una declaración de no discriminación.
Young Life, con sede en Colorado Springs, Colorado, con capítulos en escuelas intermedias, secundarias y universidades en los 50 estados y más de 90 países de todo el mundo, respondió al gobierno estudiantil que no modificaría sus convicciones.
La política de Young Life establece: “No deseamos de ninguna manera excluir a las personas que se involucran en conducta sexual inapropiada o que practican un estilo de vida homosexual de ser recipientes del ministerio de la gracia y la misericordia de Dios como se expresa en Jesucristo. Sin embargo, creemos que esas personas no deben servir como personal o voluntarios en la misión y el trabajo de Young Life”.
Muchos colegios y universidades han excluido a grupos religiosos tales como InterVarsity y Business Leaders in Christ por sus posiciones sobre la sexualidad.
En algunos casos, el problema concluyó en los tribunales. InterVarsity mantiene litigios judiciales con las estatales Universidad de Iowa y la Universidad Estatal de Wayne.
“La mayoría de las veces las universidades retroceden porque es una violación de los derechos de los estudiantes según la 1ra. Enmienda (constitucional)”, dijo Eric Baxter, vicepresidente y abogado principal del Becket Fund for Religious Liberty, bufete de abogados que defiende los casos de libertad religiosa.
Pero Duke es una universidad privada y no tiene las mismas obligaciones en el cumplimiento de la cláusula de ejercicio libre previsto por la 1ra. Enmienda.
En el Vaticano
Dos meses atrás, el papa Francisco se reunió en el Vaticano con el sacerdote jesuita estadounidense James Martin para hablar sobre los católicos LGBTQ+. Debe recordarse que Jorge Bergoglio -el nombre del pontífice- también integró la Compañía de Jesús.
“Fue increíble y muy consolador”, confesó Martin a Religion News Service. “La conversación fue muy fácil y se enfocó en el ministerio a los católicos LGBTQ+, de los cuales (Francisco) estaba feliz de hablar… Pasé 30 minutos con un pastor cálido y compasivo”.
Martin no discutió los detalles de su conversación con el pontífice católico apostólico romano, que tuvo lugar con la presencia de ambos y un traductor, en la biblioteca privada del Papa, donde a menudo recibe a jefes de Estado.
El Papa le había pedido reunirse a Martin durante una reunión con el Dicasterio de Comunicación del Vaticano, del que Martin es consultor.
Según él, esto “muestra la preocupación (de Francisco) por las personas LGBTQ+”.
Martin, cuyo libro de 2017, “Construyendo un puente: cómo la Iglesia católica y la comunidad LGBT pueden entrar en una relación de respeto, compasión y sensibilidad”, avivó el debate entre los católicos estadounidenses, logró el respaldo de algunos obispos católicos aunque él no fue invitado a hablar en instituciones católicas para promover el libro, y el sitio web LifeSite News reclamó que él fuese removido como asesor del Vaticano.
Michael Voris, el jefe del sitio web católico conservador Church Militant, también atacó a Martin, llamándolo “homosexualista” y “hereje”.
Francisco ha tenido una relación errática con los activistas LGBTQ+ en USA. En 2013 ,poco después de convertirse en Papa, respondió una pregunta sobre sacerdotes homosexuales: “¿Quién soy yo para juzgar?”.
Sin embargo, desde entonces fue criticado por el LGBTQ+ por no cambiar la enseñanza de la Iglesia, que se refiere a “tendencias homosexuales” como conductas “Objetivamente desordenada”.
La Campaña de Derechos Humanos, por ejemplo, ha declarado al Papa “complicado para las personas LGBTQ+”.
El Ministerio New Ways, cuyo CEO es Francis DeBernardo, difundió una declaración que “aboga por la justicia y la igualdad para … (LGBTQ) católicos”.
“Es una señal clara de que el papa Francisco está llamando a la Iglesia a la conversión para alejarse de los mensajes negativos que ha enviado en el pasado sobre las personas LGBTQ+. Es un día de celebración para los católicos LGBTQ+ que han anhelado una mano extendida de bienvenida de la iglesia que aman”, agregó el texto.