Las semillas de chía son alimento del cuerpo y la mente y por eso en los últimos años cobró relevancia, no solo dentro de la cocina vegetariana, sino en toda clase de dietas. Semillas de chía Las diminutas semillas ovaladas y grises se extraen de una planta de flores violetas, de la misma familia de…
Las semillas de chía son alimento del cuerpo y la mente y por eso en los últimos años cobró relevancia, no solo dentro de la cocina vegetariana, sino en toda clase de dietas.
Semillas de chía
Las diminutas semillas ovaladas y grises se extraen de una planta de flores violetas, de la misma familia de la menta. Su denominación técnica es salvia hispánica, aunque quienes le dieron el nombre fueron los mayas.
Para este pueblo originario y también para los aztecas, su nombre significaba fuerza y explica en parte la razón por la que era un elemento predilecto en sus gastronomías.
Hay paisajes en México, Nicaragua y Guatemala que aún dan cuenta de la importancia que poseía la chía para los habitantes prehispánicos, ya que todavía crece de forma silvestre.
Siglos atrás los nativos secaban la semilla, la tostaban y molían. De esta forma obtenían una harina densa que llevaba el nombre de chianpinoll.
Luego de la invasión europea este superalimento quedó relegado, repitiendo una historia similar a la sucedida con la quinoa.
Aun así, algunas comunidades de aquellas regiones mantuvieron la tradición y en los últimos años se propagó por todo el mundo gracias a la multiplicidad de propiedades que presenta, incluso llegó a ser producida en cápsulas por la industria farmacéutica.
Alimento del cuerpo y la mente
La mayor característica que presenta la semilla precolombina es su riqueza en Omega 3, que supera al pescado y es una de las mejores fuentes entre los vegetales.
Algunos de los principales beneficios que resultan del consumo de este ácido graso son:
- Tienen
propiedades antiinflamatorias, recomendable para dolencias de articulaciones - Favorece el
aspecto de la piel y el pelo - Refuerza el
sistema nervioso central - Presenta propiedades antitrombóticas y
vasodilatadoras que ayudan a regular la presión arterial y el colesterol en
sangre - Es nutrición para el cerebro y fortalece la
comunicación neuronal
El Omega 3 no es la única razón por la que es recomendable incluir chía en la dieta de cualquier persona. También es una gran fuente de fibra debido a que una sola cucharada aporta el 20% de la cantidad diaria necesaria.
Este elemento colabora en:
- La diversidad de la microbiota y el funcionamiento adecuado del sistema digestivo
- El control y la disminución de peso
- La generación de saciedad
Además, las semillas presentan antioxidantes que aletargan el envejecimiento y previenen infecciones, vitaminas del grupo B que combaten la fatiga, proteínas que regeneran el músculo luego de actividad física y abundante agua debido a su calidad de hidrófilas.
Por último, brinda otros componentes en menor medida como: calcio, fósforo, magnesio, potasio, hierro, zinc, selenio, boro y cobre.
¿Cómo incorporarla?
Las semillas de chía molidas se convierten en una alternativa nutritiva a las harinas refinadas del desayuno y la merienda. Adicionalmente a la lista de beneficios, son bajas en sodio y recomendables para diabéticos.
Sin embargo es importante saber que para aprovechar todas las propiedades es conveniente hidratarlas o molerlas previo al consumo.
Por otro lado, aunque las semillas de chía son alimento del cuerpo y la mente no es recomendable exceder la ración diaria recomendada de 10 gramos, es decir, dos cucharadas aproximadamente.
Hay numerosas formas de añadir este alimento a las mesas cotidianas:
- De postre estilo pudding: se las reposa en agua varias horas y se combina con frutas o chocolate
- Añadidas en batidos o licuados
- Procesadas y espolvoreadas arriba de ensaladas u otros platos de verduras
- Como reemplazo del huevo, también se la humedece un par de horas y se genera una consistencia aglutinante
- Como bebida natural en agua de chía: se la deja reposar en agua un par de horas, luego se le añade más agua, jugo de limón y azúcar para dejarla durante la noche y al otro día está lista para consumir condimentada con menta.